La urbanización ofrece la posibilidad de nuevas formas de inclusión social así como el compromiso y la movilización que refleja la diversidad de las ciudades, los países y el mundo. Sin embargo, la desigualdad y la exclusión abundan, a menudo en tasas superiores a la media nacional, a expensas del desarrollo sostenible que sirve para todos.

Por ello  la Asamblea General de Naciones en el 2014 estableció el 31 de octubre como el Día Mundial de las Ciudades  como una oportunidad para reflexionar sobre la función fundamental que desempeñan las ciudades en el desarrollo sostenible. No hay que olvidar que las ciudades son claves para alcanzar la Agenda 2030 y los Objetivos de Desarrollo Sostenible. Están además en primera línea de los complejos retos actuales, desde la crisis climática hasta las crecientes desigualdades y la polarización política. 

Los Gobiernos, las organizaciones internacionales, el sector privado y la sociedad civil debemos trabajar juntos para movilizar la financiación de ciudades resilientes y sostenibles.  Hay que comprometernos a trabajar para que las zonas urbanas no solo sean motores de crecimiento, sino también modelos de sostenibilidad, resiliencia y prosperidad para todos.  Solo juntos avanzaremos hacia una mejor calidad de vida!